"Un reconocimiento debe ser público, y una llamada de atención debe ser personal e inicialmente en privado"
La mayoría de los profesionales que conozco valoran más el reconocimiento: unas palabras de "felicitaciones", "Buen trabajo", "Que bien está quedando el proyecto" y para cerrar las felicitaciones públicas por los proyectos culminados, y más aun si son publicadas en medios de comunicación y mencionan sus nombres: estos artículos, documentos, revistas y demás los guardamos como un trofeo, y nos esmeramos en los proyectos que nos asignan, nace una especie de competencia sana y la curiosidad por saber quien o que equipo de proyecto será reconocido en determinado periodo.
Con todo lo mencionado antes, si el proyecto no tiene recursos adicionales para reconocimientos económicos, no hay porque pensar que es la única forma de motivar al personal.
Muchas veces gestionar reconocimientos de empresas o personas con mayor cargo que el mío es la forma de motivar a mi personal. Mi presupuesto es limitado pero es hermoso ver el rostro del equipo cuando mencionan o leen una revista (cuanto más publica y de mayor alcance mejor) donde describen el esfuerzo y resaltan las bondades de éste.
Mas por el contrario si algo salió mal, en el proyecto o rendimiento se evidencia fallas, es mucho mas efectivo llamarlo y en lugar privado conversar y ver el porque del cambio. Manejarlo en etapas evaluando si puede ser manejable o no, de no serlo podría pensarse en medidas más drásticas pero al principio es bueno enterarse y darle la oportunidad de reivindicar.
Se me vino esto a la mente porque esta semana por la premura del tiempo y reuniones que tuve no hice reconocimiento alguno a dos proyectos que culminaron exitosa mente. estuve tan atareada que no me percaté que lo que necesitaban era unas felicitaciones, los lideres del proyecto vinieron a mi oficina en varias ocasiones, realizándome consultas y presentando los documentos de conformidad general que no les presté atención. Mañana a primera hora voy a realizar esta tarea tan sencilla ya la vez muy importante.